El presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Horacio Rosatti, renovó hoy su reclamo por la falta de cobertura de vacantes en los tribunales nacionales y federales, una situación que definió como una de las principales problemáticas que enfrenta el Poder Judicial. Según advirtió, la parálisis en los nombramientos afecta de manera directa el funcionamiento del sistema de justicia y expone una desigualdad entre los tres poderes del Estado.

“Tenemos vacantes en la cobertura de jueces y eso supone la acción de los otros dos poderes. Hace más de dos años que esto está prácticamente paralizado y no hemos podido hacer nada”, sostuvo Rosatti.

Un sistema al límite

De acuerdo con cifras oficiales del Consejo de la Magistratura, de los 1.002 jueces titulares que deberían desempeñarse en todo el país, faltan 337. Del total de vacantes, 153 pliegos se encuentran en trámite en el Consejo, mientras que otros 184 permanecen detenidos en el Poder Ejecutivo o en el Senado.

En este contexto, y ante jubilaciones y renuncias previstas, se estima que para el año próximo la mitad de los despachos judiciales podrían quedar sin juez.

Rosatti remarcó que la Justicia se encuentra en una posición desigual frente a los otros poderes del Estado. “Cuando se produce una vacante en el Congreso, de un diputado o un senador, es inmediata la cobertura. Y acá, como nosotros dependemos de los otros dos poderes, estamos en una situación asimétrica”, explicó.

Pese al escenario adverso, el presidente de la Corte dijo mantener expectativas de una pronta resolución. “Tengo expectativa de que esto se resuelva en el corto plazo. En el corto plazo la remisión, después está el trámite en el Senado”, señaló.

Relación distante con los presidentes

En una entrevista publicada este domingo en el diario Perfil, Rosatti también se refirió a su trato institucional con los distintos presidentes y describió un vínculo distante con todos ellos. “No me he llevado bien con los presidentes, para decirlo de modo elegante”, afirmó.

Sobre su designación durante la presidencia de Mauricio Macri, relató que nunca mantuvo contacto directo. “Él me propuso, sin haber tenido una entrevista conmigo, el cargo me lo ofreció la vicepresidenta. Y después nunca tuve contacto con él. Nunca”, sostuvo.

En relación con el mandato de Alberto Fernández, indicó que el vínculo fue igualmente inexistente más allá de lo institucional. Respecto del actual presidente, Javier Milei, aseguró: “No lo conozco, no lo vi nunca, salvo los 1° de marzo, que es simplemente darle la mano y nada más. Nunca hablé con él. Nunca tuve una charla con él, ni pública ni privada. Con su hermana tampoco”.

Rosatti agregó que ningún presidente ni vicepresidenta lo llamó jamás por el destino de un expediente judicial.

El peso, la dolarización y la Constitución

El titular del máximo tribunal también abordó el debate económico en torno a la dolarización. Consultado por declaraciones previas al diario español El País, reiteró que reemplazar el peso argentino por una moneda extranjera es inconstitucional.

“La República Argentina no puede emitir una moneda que no sea nacional, no puede emitir dólares, no puede emitir reales”, explicó, y recordó que lo que sí permite la Constitución es la comparación de la moneda nacional con otra, como ocurrió durante la convertibilidad.

“No podemos tener una única moneda que sea extranjera, porque no la vamos a poder emitir, no vamos a poder acuñarla y no vamos a poder fijarle el valor, con lo cual vamos a estar pendientes de si se devalúa esa moneda o no. Eso está prohibido en la Constitución”, enfatizó.

Finalmente, Rosatti sostuvo una postura restrictiva sobre la emisión monetaria y afirmó que la Carta Magna obliga a defender el valor de la moneda. En ese sentido, advirtió que una emisión incontrolada sin respaldo real “también está en contra de la Constitución”, ya que incrementa la oferta y reduce el valor intrínseco del peso.

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